2005; transición hacia la felicidad

Ya se fue y casi tan breve llegará un nuevo año. Se marcho 2005 tan de puntillas como vino. En Enero despues de tener una velada de Noche de Reyes fantastica en mi hogar con mi familia empezé a trabajar en un restaurante. Trabajé duro para sacarme mucha pasta. El mes de febrero segui currando, haciendo horas, saliendo mucho y disfrutando. Me visitó Maria y desde entonces no la he vuelto a ver. En marzo, sentia cada día la ausencia de mis amigos y la idea de abandonar el restaurante era fija para empezar un curso del inem. En abril, mis mañanas eran para la piscina, para la cocina y me volví un buen amo de casa. Por las tardes el curso de nominas acaparaba mi tiempo. Mayo fue el mes del calorcito del apañamiento, con el curso avanzado, empezé a tener la idea de hacer otro curso por la mañana. En junio, compaginé los dos cursos pero ya en la primera semana empezé a buscar empleo muy seriamente e hize varias entrevistas en madrid. En la última de ellas, me seleccionaron y emprendí el viaje a la jungla. Desde allá escribí las mejores paginas de este blog. La tristeza, la monotonía y la agonia valbuzeaban en mi corazon y era un tormento lleno de álgidos sentimientos. Terminé el mes fenomenal, en las fiestas de mi pueblo empezé a sembrar el gran verano que me esperaba. En julio como no podía ser de otra manera trabajé en madrid y todos los findes me iba al pueblo. Vivir con mis amigos me hizo bien pero fue lo unico bueno de madrid. Y el mes acabó con mi cumple. En paradinas era muy muy feliz. Agosto fue el mes de la decisión de volverme. No había marcha atras. Entre la comodidad y el riesgo me decanté por lo segundo y volví a casa a hacer un curso de comercio exterior. El curso fue un error pero no el venirme. Acabé el mes en las fiestas de Paradinas, las mejores sin duda de los ultimos años. En septiembre el curso acaparó absolutamente toda mi vida. Octubre tuvo como bueno las practicas del curso y empezó el agobio de buscar curro. En noviembre, a mediados se apareció la virgen en nombre de Soraya y me dio el contacto para encontrar este maravilloso trabajo. Diciembre, fue el mes de la tranquilidad.
Lo mejor de este año: el dia de Reyes, el Viñarock, la Feria de Sevilla, la valentia de irme a madrid, las fiestas y verano de Paradinas, la valentia de venirme de madrid, mi cumpleaños, encontrar trabajo y saber apreciar y disfrutar de los momentos más sencillos que nos regala la vida. Salir con más gente, me ido encontrando nuevas gentes. Casi todo lo que me ha pasado ha sido bueno… un año de transición amorosa, camino a la perdición, estoy sembrando para encontrar una buena mujer. Las cosas malas sobre todo ha sido saber encontrar la tristeza en Madrid, dejarme inundar por la tristeza ajena. Tambien creo que los amigos se mudan como gusanos…hay que aceptar que unos vienen y otros se van y no crear ningun trauma de capitulos de la vida. Disfrutar de los que quieran estar y perdonar a los que no están. Lo mejor tambien son los amigos, estos que digo que quieren estar. Por supuesto que la familia está antes que todo, ahí siguen estando. Y nada, sin duda alguna la canción del año es «el rescate» de enrique bunbury, la imagen del año la tomo del cercanias de madrid, la tristeza de las caras que me enseño que yo no quiero vivir así entonces por eso tomé decisiones arriesgadas que me han dado la razón. Parece que el volver a casa es lo más comodo pero para mi es lo más arriesgado porque puede sonar a asentar el culo y pasar de todo y para mi ha sido todo lo contrario, tomé medidas contra la apatia y por eso me siento feliz. El beso del año puedo decir que ha sido aquel que me halla echo sensible. Si este año es igual que el 2005 será bueno pero si es un poco mejor será la leche. Os deseo lo mismo que a mi. Paz, salud y una buena dosis de cariño.
Canción para hoy: «El rescate», Enrique Bunbury