Es lo que hoy te espera… es más duro pasar con dignidad la tarde de un domingo que verte restregado por la rutina de una semana. Esas putas que te saludan, queriendo que aún seas su amigo, es el mayor insulto que puede recibir uno. Que se lo digan a killo. Hay que ver que fácil es ser presa de un cazador que no dispara a matar, si no que te malhiere para que no puedas huir, y además, si te necesita, te va a rematar. Día de sol, de noticias perversas póliticas, de olvidos que se suben por las paredes, de revoluciones que nunca hubo y que nunca habrá. De amistades imposibles, de besos anhelados, de helados de limón y menta. Tardes de puro dominguero, de Farias, mareantes como las pibitas que pasean libremente mostrando sus encantos. Tardes de amigos, tardes de resaca emocionales, tarde de rascarse los huevos de tanto usarlos la noche anterior, tarde de pañuelos, de secar todas las lágrimas producidas en el cuarto pacharán. Y al fin y al cabo, que más da que gane la liga el Real Madrid? Me va a arreglar la vida? No espero que esas pelotas me alivien.
Canción para hoy: «All apologies», Nirvana