El 15 de marzo de 2004 fue un dia diferente. Iba caminando a mi trabajo con una sonrisa especial. Parecia que estaba rodando un anuncio o quizás, que me había tocado la loteria. Pero sólo había habido un cambio de gobierno. Aquel hombre al que inventaron una campaña electoral muy efectiva, aquel politico que transmitia frescura se había alzado con el sillón de la Moncloa. Por fin, un socialista autentico. Algunos años despues ese socialismo se convirtió en un diluyente ideario asentado sobre los jodidos mercados, las notas de unas agencias, sobre el precio del petroleo y no se cuantas razones más para alejarnos de aquel sueño. Al menos, este pais ha avanzado en derechos sociales y eso es lo que queda. Es innegable. Somos un poco más libres pero tambien más presos del exterior. Los numeros. Y de lo sueños? donde están los sueños?