Es tal el vacio, insostenible, y la letal desidia que amenaza y siento por momentos la ausencia de ti. Carente de todo, disidente de nada; muero por impulsos de agonizante grillete, aprisionado por injustas manos y mil fuerzas.; no son suficiente más de mil pasos para escoger el camino adecuado. Estoy cansado, las piernas ya no responden y no me conocen pero me llevan a ti. No soy capaz de escribir con sentido. Ese sentido que intento buscar y que parece nunca encontrar. Por momentos cansado y viejo, aunque solo tengo ventiocho. Más cerca del hundimiento.
Canción para hoy: «El mar no cesa», Héroes del Silencio