Porque las cosas que nos suceden, ocurren por algo. Quizás por que tengan que ocurrir, porque las cosas cambian.
Porque las ilusiones siempre seguirán intactas, porque las tenemos que cuidar.
Porque nunca un paso atrás, nunca un beso mal dado, nunca una curva mal tomada.
Como no hay Dios que intervenga dejemos que el destino nos sorprenda.