Tus lágrimas son las mías, Hala Unión siempre.
Antes de nacer ya estaba concebido para amarte sin fisuras. Hasta el final de mis días que nunca supuse fueran posteriores a los tuyos. La ilusión de aquel padre ,que a su primer hijo varón le puso por nombradía el del astro portugués que vestía la casaca blanquinegra acompañada de sus inseparables guantes negros, nunca […]